El otro día saltó la noticia del evento del año 2006 de la casa de las ideas:
Civil War. Al leerla me surgieron varias dudas: ¿El evento del año 2006 no era
Planet Hulk?¿O era
Annihilation?
Y es que la verdad, desde
Avengers Disassembled la cosa no ha parado en
Marvel:
House of M, Decimation, The Other, Planet Hulk, Annihilation y ahora
Civil War, que este ya es seguro el macroevento del 2006... de momento. Últimamente, cada historia que se saca es un macroevento o un gran crossover o las dos cosas. Parece que hubiéramos retrocedido 10 años y nos encontráramos inmersos en la vorágine de crossovers y portadas múltiples de aquellos inolvidables
(por desgracia) años 90. Da la impresión de que ya no existieran las historias normales, las de toda la vida, ahora sólo hay eventos.
No os creáis que es un pecado exclusivo de
Marvel,
DC también abusa lo suyo, mirad si no esta lista:
Countdown, Seven Soldiers, One Year Later, 52 y, por supuesto,
Infinite Crisis. No voy a excusar a estos pero al fin y al cabo, salvo
Seven Soldiers, todos los demás forman parte de un sólo evento, aunque muuy largo y están siendo un poco más discretos que en
la casa de las ideas. En Marvel parecen querer mantener al fan a toda costa dándole más y más incentivos, estirándolos artificialmente hasta el infinito y esto ya se sabe en qué tiene toda la pinta de ir a desembocar.
¿Pero por qué ahora?¿No acabaron bastante escarmentados tras los 90 que tienen que repetir el error? ¿Qué situación se da actualmente que propicie este tipo de fenómenos? ¿Por qué en cada convención se le da bombo y platillo a un nuevo evento?¿Cómo nos enteramos de lo que se ha dicho en esa convención al otro lado del océano? La respuesta a todas estas preguntas es la misma:
Internet.
En más de un sitio he oído comentar que
Internet ha traído un exceso de información. Hasta el punto de querer saber qué pasará en tu comic favorito, poner cara a tu autor favorito y saber cuál será su próximo proyecto. Pero no nos quedamos ahí y cada vez queremos más detalles y esto a veces llega a parecerse sospechosamente al mundo del corazón donde nos puede llegar a interesar el más zafio de los detalles con tal de estar informados. Quizá en España aún no sea tan exagerado, pero se debe simplemente a que el peso de
Internet es mucho menor.
Quesada y compañía aprovechan el fenómeno. Sólo nos dan lo que pedimos. Si el bombo y platillo que dan es excesivo, lo hacen sólo para satisfacer esa necesidad de información donde los editores y las noticias son más importantes que los tebeos.
Espero que se acaben dando cuenta o esto acabará reventando por algún lado o si no fijaos de nuevo en los 90.
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